El mecanizado aeronáutico en Corredor del Henares ha alcanzado uno de los niveles de evolución más amplios desde que se empezó a a trabajar en esta industria. En primer lugar, se comenzó este trabajo a partir de madera y materia textil. El primero de los materiales servía de estructura para el futuro avión, mientras que la tela se encargaba de buscar la aerodinámica. Estos materiales no triunfaron debido a que la madera, pese a ser muy resistente y tener grandes características para esta industria, también, se veía seriamente dañada por los temporales.
Los motivos expuestos con anterioridad acabaron con el uso de esos elementos y, más tarde, se empezaron a utilizar los metales. Todavía en la actualidad, el mecanizado aeronáutico en Corredor de Henares utiliza aleaciones especiales de hierro que permiten al avión llevar a cabo los trayectos y soportar la presión de la altura. El más utilizado tras la madera fue el aluminio. Al principio no parecía rentable debido a que, en su estado puro, no era tan resistente y su obtención era mucho más complicada. Con el paso de los años y los avances para conseguir aleaciones se convirtió en el más utilizado por la industria.
En la actualidad, se utiliza, en su mayoría, una aleación del aluminio conocida como duraluminio. Esto se debe a que presenta características de resistencia muy similares a las del acero. Además, se trata de un metal que es muy complicado de oxidar. Este se acompaña, en algunas partes, de materiales como el titanio que sirve para adquirir mayor resistencia térmica con respecto a otros. Por último, en los años más cercanos, se ha incrementado el uso de materiales no metálicos que sirven para formar mayor unión y liberar tensiones entre las piezas como lo son la fibra de carbono o de vidrio.
Desde Tecmaer utilizamos estos materiales tras un estudio de sus características y propiedades para su futuro uso en la construcción de aviones.